Antes que nada, quería hacer una aclaración. Gil anunciaba en su artículo que cualquier persona que acceda ahora a Internet se convierte en productor. Cierto. Pero no hay que llevarlo todo el mismo terreno del periodismo. Es decir, estamos confundiendo el periodismo digital con el periodismo ciudadano. Dos conceptos compatibles.
Estamos tan atraídos por el periodismo ciudadano –en el que realmente cada internauta se convierte en productor– que perdemos de vista el periodismo digital: el que se hace exclusivamente para Internet. Igual que hay periodismo radiofónico o televisivo, hay que empezar a hablar del periodismo digital. Y éste lo hace el propio periodista, no ningún ciudadano.
Dicho esto, comenzamos con la descripción del periodista digital utilizando como patrón el análisis de Quim Gil:
-Capacidad de selección
Es cierto eso de que en Internet cabe todo. Y, posiblemente, el error más común es querer dar toda la información que nos llegue. Craso error. Hay que hacer frente a la sobreabundancia de información.
-Personalizar las fuentes
Aunque el soporte utilizado sea Internet, no quiere decir que nuestras fuentes sean únicamente digitales (documentos, artículos publicados por otros medios...), no hay que caer en el error de despersonalizar el mensaje.
-Mostrar todas las fuentes
En un periódico es posible que no tengas la necesidad de mostrar todas las fuentes. Es decir, puedes haber consultado un simple documento pero no existe la necesidad ética de citarlo. Para el medio digital eso no sirve. Tenemos que dar al lector todas las fuentes consultadas. Es la cultura del hipertexto.
-Hiperespecialización
No podemos caer en el error de que por ser periodista digital sabemos más que el resto. Craso error. Toda la comunidad a la que nos dirigimos tiene un conocimiento más exhaustivo que el nuestro. Es más, hay mayor probabilidad de que el hecho del que se habla lo haya podido presenciar antes un lector que un periodista (analicemos el número de periodistas y de ciudadanos y la ecuación se resuelve). El triunfo está en las minorías.
Eso nos lleva a que el periodista debe saber de todo, pero saber mucho más de lo que va a escribir. Siguiendo la tendencia, podemos observar que en unos años las generalidades van a desaparecer. Nos moveremos por nichos. Por redes sociales pequeñas, pero especializadas. El informador debe ser capaz de sobrevivir en ese nuevo entorno.
-Una noticia con personalidad
Hasta ahora, escribir para el medio digital había supuesto cortar y pegar. Ahora, ese modelo es caduco. Hacen falta ver firmas. Es decir, debemos apostar por los enfoques personales, los detalles que diferencian a un periodista de otro.
-Hacia el Internet que se ve
Leer ya no llama la atención. Es una simple rutina. Pero el medio digital empieza a ver otra forma de comunicar a través de los audios y los vídeos. Con una simple maquinaria podemos hacer la competencia a grandes cadenas de radio o televisión que se gastan millonadas en sus estudios.
El periodista digital debe ser capaz de cubrir la noticia y volver con un contenido para cada formato. En otras palabras, debe ser capaz de cubrir un acto y luego plasmarlo en un texto (cuidando el hipertexto), una pieza de audio e incluso un vídeo.
-El periodista que hace de todo
Existe el nefasto tópico de criticar a los periodistas que hacen fotos. Partimos del hecho de que la figura del fotoreportero es una obligación para la profesión. Ahora bien, ¿acaso un redactor no puede ser fotoreportero? Aunque se complique el mercado laboral, vamos hacia ese modelo.
Incluso, vamos a más. Estamos hablando de un redactor que sepa editar un texto, pero también un audio y un vídeo. Se acaban los intermediarios. La noticia es un ya.
-Información abierta
En el nuevo estatus que plantean los medios digitales, la noticia no se acaba nada más publicarla. Cada segundo que pasa puede aparecer un dato nuevo que se debe actualizar al instante. Es una noticia que nunca ve su fin.
-El periodismo instantáneo
Hablar de cultura digital es cubrir la noticia en riguroso directo. Ya no sirve darla con una hora de retraso. El periodista digital debe ser capaz de darla en el mismo instante en el que se produce.
-Periodista glob@l
El perfil que hace falta puede quedar resumido en el concepto de global. Viene a decir que el periodista digital debe defenderse en todo el conjunto de la comunicación. Eso implica que defenderse en todos los soportes porque Internet lo engloba todo. Es la revolución.