The Economist explora la figura de Evan Williams, el fundador de Blogger, Odeo y Twitter y también People of the year en el año 2004 para PC Magazine. En cierto modo, nos presenta dos formas de gestionar el talento: una basada en la racionalizad y otra en la libertad de innovación.
Aunque el propio Williams matiza en su blog algunas cuestiones que aparecen en el reportaje, es interesante la definición metafórica que se hace sobre qué parte del cerebro predomina en las empresas de Silicon Valley’s y en el ideólogo de Blogger o Twitter.- Google encarnaría la parte izquierda del cerebro. Es decir, se basaría en la lógica y en la racionalidad a la hora de gestionar los proyectos. Aunque Williams matiza la afirmación, la demostración de su comportamiento es que supera los problemas con fuerza bruta: algoritmos matemáticos y funciones informáticas.
- Williams, por su parte, se dejaría llevar más por las emociones. Goza con lo ilógico. Con romper las normas y arriesgando. “Mr Williams loves frustration”. Su motivación es resolver los problemas intrincados.
De hecho, opta por dejar Google –había entrado después de la venta de Blogger a la compañía- porque no se encontraba cómodo trabajando sin la independencia que atesoran los genios. Se fue a Odeo y su último gran golpe ha sido lanzar Twitter.
Me quedo además con tres ideas sobre la innovación que vendrían a definir a Evan Williams:
- La gestión de nuevas ideas que aparecen por casualidad.
- La complejidad de transmitir la idea a un equipo.
- Todos esas ideas... parecen con el paso del tiempo la simple aplicación del sentido común.
